En este post halaremos del SEAT Ibiza, el segundo coche más vendido en España, desbancado del primer puesto por su hermano mayor; el SEAT león que ocupa el primer lugar. Se trata del coche más popular de la marca española, gracias a sus más que aptas prestaciones un precio moderado.
Desde su creación en 1984, han desarrollado 5 generaciones del SEAT Ibiza, y es la última la que vamos a someter a este análisis donde comprobaremos su buena seguridad, gran habitabilidad y tecnologías renovadas. En su evolución podemos destacar su longitud, la cual ha pasado de los poco más de 3,7 metros de longitud a unos generosos 4,06 metros y además presumiendo de una anchura más propia de un compacto.
El modelo que ponemos a prueba es el SEAT Ibiza 1.0 TSI 95 CV Style, el cual incorpora un gran equipamiento (opcional). Estos son los veredictos, después de una semana mano a mano con el vehículo.
El DISEÑO
Podría decirse que algo a destacar en el nuevo SEAT Ibiza es su diseño, es cierto que es parecido al SEAT león pero dado su gran éxito en el mercado no parece que sea un problema. Presenta una imagen dinámica y fresca y ha conseguido combinar a la perfección elegancia y dinamismo a partes iguales. Su diseño es sobrio con un aire clasista en sus trazos.
Su anchura ha aumentado a 1,78 metros, siendo la más generosa de su segmento y superando a muchos compactos. Esto hace que aumente la sensación de robustez y habitabilidad. En cuanto a las puertas son amplias y dejan un acceso cómodo, no hay voladizos exagerados ni salientes expuestos a golpes, etc.
También hay que tener en cuenta que dependiendo del equipamiento elegido la estética puede mejorarse notablemente. Embellecen mucho este modelo de SEAT Ibiza las ópticas Full LED con la iluminación diurna, las llantas de aleación de 16 pulgadas o las elegantes y sutiles molduras cromadas del marco inferior de las ventanillas. En la parte trasera podemos elegir tecnología led para las luces de posición y unos grupos ópticos que quedan muy bien.
INTERIOR Y EQUIPAMIENTO
En el interior lo primero que nos llama la atención es el salpicadero, que presenta un diseño más convencional y práctico, aunque no más ergonómico. La pantalla multimedia está en una ubicación un tanto baja. Si contamos con el control de crucero adaptativo añade una palanca adicional en la caña de dirección, la cual sería más cómoda y practica desde el propio volante.
El sistema multimedia, es de lo mejor del mercado gracias a su resolución, facilidad de uso y funcionalidad. Si escoges navegador, podrás disfrutar de pantalla táctil de ocho pulgadas. También puedes incluir en el equipamiento cámara de visión posterior, sistema de sonido Beats de alta calidad y cargador de móviles sin cables, todo ello con un funcionamiento excelente.
El ordenador de viaje, es muy intuitivo manejándose desde el volante. Ofrece datos como el consumo, velocidad, o temperatura del aceite y agua. También se pueden observar datos de ayuda a la conducción, navegación o sistema de audio.
Bajo el climatizador automático (de dos zonas, algo no tan habitual en el segmento B) se esconden los puertos USB (2) y la zona de carga inalámbrica para móviles.
Si hablamos de la calidad de los plásticos, podría decirse que es bastante buena, sin embargo se aprecian rígidos al tacto. En el salpicadero encontramos una plancha central que alegra la sobriedad que presenta en su aspecto general.
La calidad en términos generales es muy buena, pero no podemos decir lo mismo de los acabados. En este último modelo de SEAT Ibiza echamos de menos los asideros de techo y de revestir el portón del maletero, y tampoco hay plafón o luz alguna para la segunda fila. Otro detalle que puede mejorarse son los marcos de las puertas, que dejan verse desde el interior.
LA HABITABILIDAD
El nuevo Ibiza presenta muy buena habitabilidad incluso dando la sensación de pertenecer a un segmente superior, gracias a la holgada cota de anchura. Ofrece un gran espacio en el interior hacia todas las direcciones proporcionando una sensación de desahogo.
El asiento del conductor es muy cómodo, y puede regularse fácilmente la postura en el volante gracias a las múltiples regulaciones de asiento y volante. Podría mejorarse con una mayor sujeción lateral en los asientos.
Los asientos de atrás han mejorado mucho el espacio para las piernas y ahora resulta muy cómodo viajar. La anchura es correcta pero si sube un tercer pasajero encontrara incomodo el túnel de transmisión con dimensiones excesivas y un mullido del asiento algo más duro y sobre-elevado.
Dispone de un gran maletero de 355 litros, el mejor de su segmento. Gracias a sus formas se puede aprovechar todo el espacio abatiendo los respaldos. Y por 200 € se puede añadir el doblo fondo ajustable. El acabado en si es bueno, hay ganchos y no deja chapa a la vista.
EL MOTOR
El SEAT Ibiza que hemos puesto a prueba, 1.0 TSI de 95 CV, es la opción más equilibrada. Su motor de tres cilindros ofrece buenas prestaciones y un consumo razonable. Este es contenido siempre y cuando no se sobrepase la velocidad. Las medias se sitúan en 6,0 L/100 en vías rápidas o autopistas, y 6 y 7 L/100 en cuidad, siempre dependiendo del tráfico.
Siendo un tres cilindros no tiene un funcionamiento tosco (el 1.0 MPI vibra más, al menos en el Mii) o el ruido resulte molesto. Las vibraciones también están bien disimuladas y aunque se perciben algunas ligeras, no suponen un problema.
Las otras opciones que nos ofrece la marca española son los bloques diésel 1.6 TDI de 80, 95 y 115 CV, el bicombustible gasolina/metano 1.0 TGI de 90 CV y los gasolina 1.0 TSI de 95 y 115 CV, el 1.5 TSI EVO de 150 CV como tope de gama y el básico 1.0 MPI de 75 CV.
COMPORTAMIENTO
El tarado de la suspensión, tirando a blando, permite oscilaciones de la carrocería controlados e incluso en los giros cerrados inclina bastante, restando algo de agilidad. En positivo obtenemos mayor suavidad al superar los badenes o resaltos habituales en las vías urbanas.
El tacto de la dirección es correcto y tiene una buena asistencia que facilita la conducción y las maniobras de aparcamiento.
Para cuidad es un coche cómodo, practico y con buena visibilidad. El mayor “pero” es la falta de empuje a bajas vueltas, lo que hace estar muy atento del cambio e ir jugando con él para conseguir una respuesta más inmediata. El aparcamiento es cómodo y sencillo, sobre todo si se incluyen los sensores y la cámara.
En n autovía el SEAT Ibiza se defiende muy bien. Es un coche muy cómodo con el que realizar largos viajes y con un motor suficientemente solvente y prestacional. Hay que tener cuidado con el eje posterior en frenadas bruscas, ya que da sensación de inseguridad.
Para terminar, resaltaremos la estupenda iluminación de las ópticas Full LED (opcionales) tanto las cortas como las largas y con un sistema de encendido/apagado automático muy eficaz.